El Juego Limpio

Este concepto es de origen inglés en cuyo idioma se denomina "fair play". Es una expresión que se emplea para denominar el comportamiento leal y sincero en la actividad deportiva. Implica que tengamos un comportamiento, una manera de pensar y una actitud vital favorable a la lucha contra la trampa y el engaño. Al practicarlo debemos ser amistosos y respetuosos con el adversario.

No basta con cumplir con las reglas para respetar y considerar al oponente, es también no caer en ofensas a otros elementos que participan del juego, como árbitros o jueces, entrenadores, suplentes, espectadores y otros más.

¿Qué se debe evitar? La trampa, el engaño, la manipulación, la modificación indebida de los implementos de juego, el cambio de resultados o cualquier otro acto que "favorezca" a quien realiza la trampa. Es indispensable no caer en la violencia física y verbal, el menosprecio o el racismo, mismos que se originan por la soberbia que puede mostrar cualquiera de los participantes.

Asumir el juego limpio es, en primer lugar tener en cuenta dos posturas distintas, la primera que surge como la posibilidad de ver, en la actividad física como un espacio para la convivencia y el encuentro con otros; por otro lado está el lograr el triunfo como principal objetivo. Esta idea es representada por la frase "ganar no lo es todo, es lo único", acuñada en el deporte estadounidese, mientras que la primera postura se registra entre los deportistas ingleses y franceses quienes creyeron en que "lo más importante no es ganar, sino competir".

Por medio del juego limpio podemos llegar el disfrute de la actividad, sin la necesidad de realizar acciones que infrinjan las reglas, a discutir con el árbitro, etc. Por otra parte, y aunque resulte contradictorio, otro elemento del juego limpio es el deseo genuino de ganar, el no querer competir, el no querer ganar es una falta de respeto al contrario.

Un ejemplo lo tenemos cuando en en 1982 en un encuentro celebrado en el estadio Nou Camp Puebla vs León, el equipo visitante prácticamente se negó a jugar, sólo se dedicaron a pasarse el balón sin buscar la portería contraria, hecho que podemos calificar como poco deportivo y que no forma parte del juego limpio.